MIGUEL HERNÁNDEZ (1910-1942)

CANCIONERO Y ROMANCERO DE AUSENCIAS

8

El mar también elige
puertos donde reír
como los marineros.

El mar de los que son.

El mar también elige
puertos donde morir.
Como los marineros.

El mar de los que fueron.

S.C.

Gracias, Pascual

CREO QUE YA TE LO HE DICHO, QUERIDA AMIGA... NO ME IMPORTA REPETIRLO... NO A TI O A MÍ O AL OTRO... AL VIENTO: CANCIONERO Y ROMANCERO DE AUSENCIAS ES UNA OBRA MAESTRA DE UN CABRERO-PASTOR QUE REZUMABA VERSOS DESDE EL CORAZÓN HAST LAS ALPARGATAS.

GRACIAS POR ESTAR POR AQUÍ.

BESOS.

CANCIONERO Y ROMANCERO DE AUSENCIAS

9 (*)

Llegó con tres heridas:
la del amor,
la de la muerte,
la de la vida.

Con tres heridas viene:
la de la vida,
la del amor,
la de la muerte.

Con tres heridas yo:
la de la vida,
la de la muerte,
la del amor.


(*) No sé si lo habré dicho alguna vez o no. Por si no lo hubiera dicho -y a riesgo de que se me trate de dogmático- este poema debería ser EL CANON FUNDAMENTAL DE CUALQUIER POETA.

CANCIONERO Y ROMANCERO DE AUSENCIAS

10

Escribí en el arenal
los tres nombres de la vida:
vida, muerte, amor.

Una ráfaga de mar,
tantas claras veces ida,
vino y las borró.

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Escribí en el arenal
los tres nombres de la vida:
vida, muerte, amor.

Una ráfaga de mar,
tantas claras veces ida,
vino y las borró.

¡Que maravilla!
Hoy, que caí de la cama, vengo y disfruto de la buena poesía de Miguel Hernández.
Gracias, Pascual.

POR PRIMERA VEZ EN MI VIDA HE DECIDIDO HACERLE CASO A LOS MÉDICOS. VUELVO A TENER REVISIÓN DE OJOS PASADO MANANA. ES CURIOSO... LA DRA LUCAS, OFTALMÓLOGA, (INFORMACIÓN DE MI COMPAÑERA - SE HAN AALIADO CONTRA MÍ- ME HA PROHKIBIDO QUE SEA EL PRIMERO, Y EL SEGUNDO, Y EL TERCERO... Y QUE SI DEJO EL BRILLO DEL ORDENADOR, MEJOR QUE MEJOR PARA MI CLAUCOMA...

... POR PRIMERA VE EN MI VIDA, INSISTO, LE HE VISTO LAS OREJAS AL LOBO. NO ME VAS A VER MUCHO... TE ENTRISTECERAS.... Y ALGUIEN ¿LLORARÁ?

GRACIAS, LLUVIA,

CANCIONERO Y ROMANCERO DE AUSENCIAS

11

Querer, querer, querer
esa fue mi corona.
Esa es.

CANCIONERO Y ROMANCERO DE AUSENCIAS

12

Ausencia en todo veo:
tus ojos la reflejan.

Ausencia en todo escucho:
tu voz a tiempo suena.

Ausencia en todo aspiro:
tu aliento huele a hierba.

Ausencia en todo toco:
tu cuerpo se despuebla.

Ausencia en todo siento.
Ausencia. Ausencia. Ausencia.

CANCIONERO Y ROMANCERO DE AUSENCIAS

13

Todas las casas son ojos
que resplandecen y acechan.

Todas las casas son bocas
que escupen, muerden y besan.

Todas las casas son brazos
que se empujan y se estrechan.

De todas las casas salen
soplos de sombra y de selva.

En todas hay un clamor
de sangre insatisfechas.

Y a un grito todas las casas
se asaltan y se despueblan.

Y a un grito todas se aplacan,
y se fecundan, y se esperan.

Ausencia en todo veo:
tus ojos la reflejan.

Ausencia en todo escucho:
tu voz a tiempo suena.

Ausencia en todo aspiro:
tu aliento huele a hierba.

Ausencia en todo toco:
tu cuerpo se despuebla.

Ausencia en todo siento.
Ausencia. Ausencia. Ausencia.


Nada nuevo que decir.

S.C.
Gracias otra vez, Pascual.

Gracias, Lluvia...

Sigo... despacio. Pero sigo.

Besos.

CANCIONERO Y ROMANCERO DE AUSENCIAS

14

La basura diaria
que de los hombres queda
sobre mis sentimientos
y mis sentidos pesa.

Es la triste basura
de los turbios deseos,
de las pasiones turbias.

CANCIONERO Y ROMANCERO DE AUSENCIAS

15

El número de sangres
que el mundo iluminó
en dos desembocaba.
Tú y yo.

El número de sangres
que llevo alrededor
en dos desembocaba.
Tú y yo.

El número de sangres
que es cada vez mayor
en dos ha de quedar.
Tú y yo.

CANCIONERO Y ROMANCERO DE AUSENCIAS

16

Tanto río que que va al mar
donde no hace falta el agua.

Tantos cuerpos que se secan.
Tantos cuerpos que se abrazan.

CANCIONERO Y ROMANCERO DE AUSENCIAS

17

Si nosotros viviéramos
lo que la rosa, con su intensidad,
el profundo perfume de los cuerpos
sería mucho más.

¡Ay, breve vida intensa
de un día de rosales secular,
pasaste por la casa
igual, igual, igual,
que un meteoro herido, perfumado
de hermosura y verdad.

La huella que has dejado es un abismo
con ruinas de rosal
donde un perfume que no cesa hace
que vayan nuestros cuerpos más allá.

CANCIONERO Y ROMANCERO DE AUSENCIAS

18

Si te perdiera...
si te encontrara
bajo la tierra...

Bajo la tierr
del cuerpo mío,
siempre sedienta.

CANCIONERO Y ROMANCERO DE AUSENCIAS

19

No salieron jamás
del vergel del abrazo.
Y ante el rojo rosal
de los besos rodaron.

Huracanes quisieron
con rencor separarlos.
Y las hachas tajantes
y los rígidos rayos.

Aumentaron la tierra
de las pálidas manos.
Precipicios midieron,
por el viento impulsados
entre bocas deshechas.
Recorrieron naufragios,
cada vez más profundos
en sus cuerpos sus brazos.

Perseguidos, hundidos
por un gran desamparo
de recuerdos y lunas
de noviembres y marzos,
aventados se vieron
como polvo liviano:
aventados se vieron,
pero siempre abrazados.

CANCIONERO Y ROMANCERO DE AUSENCIAS

20

Sangre remota.
Remoto cuerpo,
dentro de todo.

Dentro, muy dentro
de mis pasiones,
de mis deseos.

CANCIONERO Y ROMANCERO DE AUSENCIAS

21

En el fondo del hombre,
agua removida.

En el agua más clara,
quiero ver la vida.

En el fondo del hombre,
agua removida.

En el agua más clara,
sombra sin salida.

En el fondo del hombre,
agua removida.

CANCIONERO Y ROMANCERO DE AUSENCIAS

22

Cada vez más presente.

Como si un rayo raudo
te trajera a mi pecho.

Como un lento rayo lento.

Cada vez más ausente.
Como si un tren lejano
recorriera mi cuerpo.

Como si un negro barco
negro.

CANCIONERO Y ROMANCERO DE AUSENCIAS

23.

Ni te lavas ni te peinas,
ni sales de ese rincón.

Contigo queda la sombra,
conmigo el sol.

CANCIONERO Y ROMANCERO DE AUSENCIAS

24.

No te asomes
a la ventana,
que no hay nada en esta casa.

Asómate a mi alma.

No te asomes
al cementerio,
que no hay nada entre estos huesos.

Asómate a mi cuerpo.

CANCIONERO Y ROMANCERO DE AUSENCIAS

25.

Cogedme, cogedme.
Dejadme, dejadme.

Fieras, hombres, sombras.
Soles, flores, mares.
Cogedme.

Dejadme

CANCIONERO Y ROMANCERO DE AUSENCIAS

26.

¿De qué adoleció
la mujer aquella?
Del mar peor:
del mal de las ausencias.

Y el hombre aquél.

¿De que murió
la mujer aquella?
Del mar peor:
del mar de las ausencias.

Y el hombre aquél.

CANCIONERO Y ROMANCERO DE AUSENCIAS

27.

Tengo celos de un muerto,
de un vivo, no.

Tengo celos de un muerto
que nunca te miró.

A Miguel Hernández nunca se puede dejar de leerlo!!!!!!!!!!
Cuánta belleza!!!!!!!!!!!!
Gracias amigo y besossssssss

Así es Cecilia... además CANCIONERO Y ROMANCERO DE AUSENCIAS está a la altura de las obras maestras de la GENERACIÓN DEL 27 - aunque él no solamente no perteneció a la misma sino que en sus inicios en Madrid fue rechazado por muchos de sus componentes-.

Insisto en mi gratitud. Seguiré más tarde.

Besos.

CANCIONERO Y ROMANCERO DE AUSENCIAS

28.

Qué cara de herido pongo
cuando te veo y me miro
por la ribera del hombro.

Enterrado me veo,
crucificado
en la cruz y en el hoyo
del desengaño.

¡Qué mala luna
me ha empujado a quererte
como a ninguna!

CANCIONERO Y ROMANCERO DE AUSENCIAS

29.

Tú de blanco, yo de negro,
vestidos nos abrazamos.
Vestidos aunque desnudos
tú de negro, yo de blanco.