"PROMOCIÓN POÉTICA DE LOS 50"

"Mi amistad está sobre ti como una madre sobre su pequeño que sueña
// con cuchillos.

No te pondré otra venda que la raída alrededor de mi cuerpo, no te
// pondré otro aceite que el que descansa dentro de mis ojos.

Ciertamente es una historia horrible el silencio pero hay una salud
// que sucede a la desesperación.

Acuérdate de la paz en los comercios abandonados, acuérdate de la
// dulzura en las habitaciones donde se corrompía el olvido. Nadie
// tenía razón ni esperanza, ¿qué podímos hacer?

Ahora pasan vencejos entre el nogal y su sonido tiembla sobre mí.

Tú, lejos, duermes entre alaridos, hijo mío, tú que acostumbrabas a
// enloquecer a los maestros y a las mujeres que se deslizaban
// debajo de tus dedos.

Puedes venir a repartir los alimentos y las mentiras delante de mi
// rostro. ¿Por qué quemas tu lengua en los vacíos excavados en
// pómez, por qué te abres a las semillas implacables, a las
// linazas adventicias?

Puedes cantar en mis manos pero te desdices encima de tu belleza.

Harías mucho mejor acercándote"

(A. Gamoneda. Op. Cit. Págs.- 129/130))


(Quiero luego continuar esta obra. Pero ahora voy a poner unos versos de su última obra. Esta es un manera de comprobar los cambios habidos en la poética de Gamoneda, aunque parece difícil superar una obra como "Descripción de la mentira"

"I

Has escuchado el gemido del mar. Anuncia
una inminencia.
- - - - - - - - Líbrate
del pensamiento: esta
inminencia te excede.
- - - - - - - - - - - Líbrate.
- - - - - - - - - - - - - - - - No respondas
al gemido del mar

II

El destino no existe pero está atravesado por raíces rojas.
- - - - - - - - - - - - - - -- - -- - - - - - - - - - - - - Así
es, fue, mi pensamiento atravesado
por la centella de la negación.
- - - - - - - - - - - - - - - - Así
las horas gritan, pronuncian
su profecía inútil:
- - - - - - - - - - la púrpura
y la extinción
del amanecer.

III

Sí, la negación avanza
por mis venas.
- - - - - - - Se aloja
en la sentina cóncava
del pensamiento.
- - - - - - - - Propiamente, no
hay pensamiento en mí. Me posee
la falsedad, el único
fruto consentido en esta
espesura viviente.

IV

Hay ira en las grisallas. La luz cunde en los patios
y las cuerdas dividen minerales y sombras.

La luz
sostiene suavemente la majestad de los pájaros, reúne
dentro del mismo instante la quietud y el vértigo.

¿Has pensado la luz fuera de tus ojos?

- - - - - - - - - - - - - - - - - - - - Piensa la luz.
- - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - No;
no puedes pensarla: ella
te piensa a ti.

- - - - - - - - Cierra tus ojos"

(A. Gamoneda. Canción errónea. Págs.- 81/83)

"Mi memoria es maldita y amarilla como un río sumido desde hace
// muchos años.

Mi memoria es maldita. Más allá, antes de la memoria, un país sin
// retorno, acaso sin existencia:

hierba muy alta y dulce, siesta en la densidad: aquella miel sobre
// los párpados.

Era la exudación y penetraba el tiempo. Los insectos se fecundaban
// sin cesar y la serenidad nos poseía. Pero aquel tiempo no
// existió: sucedió en la inmovilidad como la música antes de su
// división.

Mi memoria es maldita y amarilla como el residuo indestructible de
// la hiel.

Yo extendía membranas sobre los gritos de la inutilidad. Ésta fue
// mi justicia, pero ¿que ha quedado de mi alma?

No me busques en la justicia. No encontrarás mi cuerpo en iglesias
// ni en profecías insufribles como los tábanos en la lengua de los
// animales muy enfermos.

Mi amistad está sobre ti y tú no estás debajo de mi amistad. No soy
// yo el despojado: tu hermosura es tenaz pero mi cansancio es más
// profundo que tu hermosura.




En los establos donde me envuelve la oscuridad yo recibo a la
// muerte y conversamos hasta que lame dulcemente mis labios.




No es tu virtud sino la mía; no es tu acidez la que detiene a los
// perseguidores; no son tus gritos en la extremidad,

sino mi corazón y su vrgüenza, mi corazón

y la sonrisa de los torturados" (A. Gamoneda. Descripción de la mentira. Antología Poéticas. Págs.- 130/132)

(No sé si será precisa esta claración. Y en todo caso, si lo fuera, debería haberla hecho al principio. "Descripción de la mentira tiene una notable influencia Whitmanniana - un atrevimiento por mi parte pues no sé si en ese momento, o antes, Gamoneda había leído a Walt Whitman-. Pero estructuralmente el verso es largo, muy largo...hasta el punto de que puede parecer imposible declamarlo con cierto sentido lírico. Nada más lejos de la realidad. Este tipo de verso necesita : A) Primero sentarse con él. B) Segundo tomar un café con sus palabras C) Tercero familiarizarse con ella y con su contenido

Bien, ni puedo corregir las 3 o 4 faltas que hay anteriormente ni el ordenador me permite continuar con la exposición que quería hacer...Está bailando el muy "cabrito" a las seis menos cuarto de la mañana. En cuanto pueda intento arreglar esto , que se queda, por tanto a la mitad. Lo siento.

Y no siempre , en el verso libre , es fácil familiarizarse con esa "palabra" que constituye en núcleo del verso ( que, a veces, es tan largo que estrofa y verso son la misma cosa, el mismo suspiro)Los puristas esto lo han criticado en exceso y todo lo más le conceden la categoría de prosa poética: en realidad o no han sabido, o no han querido o no han podido encontrar esa palabra

"Las preguntas no existen en el idioma de la ocultación: todo está
/ dirimido.

Es perverso el idioma pero es enjundia de mi cuerpo.

Otros os engañáis con la esperanza.

En ciertos casos, mis palabras podrían atravesar tus labios, entrar
/ despacio en tu existencia; no lo que dicen sino las palabras
/ mismas, su exhalación caliente como el amor.

Estoy hablando de la expresión, no de los gritos con que ocultáis
/ la desnudez. Bajo los soportales estallan signos de impudicia:
/ ámame decís al transeunte, ámame antes de la muerte. Y os
/ entendéis en esta usura.

De otra manera, en otra lengua, yo te respiro sin encontrarte.
/ Eres incierta y ésta es tu plenitud.

Así es la edad, así es la forma de mi tiempo.



Tu voz en dátiles sangrientos surge de las sustancias distribuídas
/ sobre el mar

y su metal vuela en círculos, vuela con alas venenosas sobre ese
/ cuerpo ya dorado, ya ciego en frutos demasiado dulces.

El algodón, más verde que los relámpagos de la infancia, exhala
/ augurios que oscurecen la descripción del mar bajo los ojos sin
/ misericordia.

Y los aceites femeninos hierven en la celebración del verano.



Éste es el día del calor. Al pie del muro deseado por un sólo
/ pájaro -el portador de lágrimas en las tardes de hastío- miras
/ las urnas de la sal, la oxidación esbelta de los mástiles, la
/ longitud mortal de las banderas.

Hay negación: heridas, líquidos procedentes del desprecio, labios
/ en las spaldas de tus hijas.

Obscenidad, dulzura fúnebre,¿ quién no bebe en tus manos
/ amarillas?

Cuanto ha sucedido no es más que destrucción.

¿Sabes tú lo que es la destrucción? No, no lo sabes porque tu
/ mirada era demasiado hermosa y no quisiste sobrevivirla.

La cobardía es el único don de la imposibilidad y la cobardía
/ entró en mí y empezó a existir una dulzura que para vosotros
/ había sido despreciable;

pero vosotros, aún más desposeídos, merodeáis en torno a mi
/ pobreza y no seréis rechazados ya que os recuerdo y estáis en
/ mi necesidad".
(Antonio Gamoneda. Descripión de la mentira. En Antología poética. Alianza. Págs.-133/135)

"¿No sabes entonces lo que es la destrucción?

Ningún olor tuyo permanece y aquel testigo entre tus piernas
/ no fue salud en ti.

Tus gritos en la coronación, los qu encendían las habitaciones,
/ yacen abandonados como la camisa de las culebras.

Mi cuerpo sintió también la destrucción y me alimenté con hierbas
/ escondidas y mastiqué mi nombre y conviví con las desapariciones.

Entretanto, vosotros, jovenes y veloces, no supisteis que la
/ verdad se extinguiría:

deslumbrabais a los tribunales y erais esbeltos en la eyaculación.

Poco después fuisteis dispersados y vuestra belleza no lució en
/ las pértigas.

Sólo hubo resistencia en aquellos cuerpos que antes habían sido
/ castigados y padecieron la incredulidad y se ocultaron en el
/ silencio.

Ahora os ruego que os acerquéis. He aquí los residuos. Su
/ vibración es aún abrasadora para lo que queda de vuestras manos;

yo exprimiré tinieblas sobre vuestros labios y la pobreza entrará
/ en vuestra memoria.



Hay azúcar debajo de la noche; hay la mentira como un corazón
/ clandestino debajo de las alfombras de la muerte;

hay otra negación; otra es la ley dentro de las esponjas que
/ vosotros aborrcíais;

otra es la ley en las estancias donde el miedo habla.

Donde viven los padres ofendidos.



¿Has pensado en la paciencia, has pensado en la paciencia seme-
/ -jante a ónice, en la paciencia excavando tumbas en el sonido,
/ abandonando telas a los vientos que un día llegarán, que
/ llegarán después de las expulsiones?



La ciudad no está limpia; en los ejidos hay irritación y el
/ cornezuelo y el centeno cohabitan y crece un alimento que será
/ comida de nuestros hijos."

(Antonio Gamoneda. Descripción de la mentira. En Antología Poética. Alianza Editorial. Págs.-135-138)

"Yo no tengo esperanza sino una pasión que tú no vas a decirme.

Yo no tengo esperanza sino una pasión cuyo nombre no va a tocar tus
/ labios.

He cruzado mi infancia y países de morfina y largos bosques en los
/ que descansé y grandes alas pasaron sobre mis ojos.

En los lugares a los que yo acudo al atardecer hay frutos muy
/ espesos de los que hago recolección y mis dedos son abrasados
/ por las luciérnagas pero yo hago recolección y me demoro en
/ acudir a otros lugares, a las alcobas donde mi madre envejece
/ más allá de mi vejez.

Y las palabras, fiebre bajo las tégulas (A), grumos retrocediendo,
/ hieles que enloquecían bajo el disfraz del sueño,

¿qué son, qué hacen en mí cuando se ha extinguido la verdad?

De la verdad no ha quedado más que una fetidez de notarios,

una liendre lasciva, lágrimas, orinales

y la liturgia de la traición.

(A. Gamoneda. Descripción de la mentira. En Antología poética.Págs.- 138-139)

Sólo hubo resistencia en aquellos cuerpos que antes habían sido
/ castigados y padecieron la incredulidad y se ocultaron en el
/ silencio.

Ahora os ruego que os acerquéis. He aquí los residuos. Su
/ vibración es aún abrasadora para lo que queda de vuestras manos;

yo exprimiré tinieblas sobre vuestros labios y la pobreza entrará
/ en vuestra memoria.

Qué bueno, querido amigo Pascual, este autor!!!!!!!!!
Graciassssssssss por todo y besitossssssss

Gracias, Cecilia, por tu paso y tu comentario sobre Antonio Gamoneda. Un beso.

"Las hortensias extendidas en otro tiempo decoran ls estancia
/ más arriba de mi cuerpo.

¿Qué lugar es este, qué lugar es este?¿Cómo estás aún en mi
/ corazón?



Vi la muerte rodeada de árboles ( árboles más esbeltos que el
/ llanto de tus hermanas), urces (1) en el fulgor y la serenidad.

Vi sombra azul distribuida en sernas (2), sólo advertida por
animales tan antiguos como mi corazón, por emisarios muy
/ cansados;

la deserción sobre la boca que yo amaba (grandes banderas ante
/ los espejos del suicidio)

y la esperanza dentro del acero.



El otoño se expresa en pájaros inviibles. ¿Qué harías tú si tu
/ memoria estuviera llena de olvido, qué harías tú en un país
/ al que no querías llegar?

Pesan las máscaras de la pureza, pesan los paños sobre las formas
/ de la patría.

La vergüenza es la paz. Yo acudiré con mi vergüenza"

(A. Gamoneda. Descripción de la mentira. En Antología Poética. Págs.- 139.140)

(1).- Urce.- Brezo ( es un árbol). Sin embargo Brezo ( y brizo) tambié pueden ser usados con el significado de cuna-
(2).- Serna.- Trozo de tierra de sembradura.

Hay una tercera palabra, ahora mismo no sé cual es, cuyo significado no he encontrado. Luego buscaré la palabra e intentaré dar con lo que significa en un diccionario más moderno, pues el mío es muy antigüo. Lo que no cabe duda es que Antonio es un gran conocedor del idioma. Y este aspecto en poesía es fundamental. Los versos están separados entre sí a doble espacio ( así también en el poemario original). Y entre estrofa y estrofa hay 3 o cuatro espacios. Cuando un verso es muy extenso y ocupa más de una línea la segunda empieza con el símbolo / ( en el poema original con un espacio en blanco).

El poema, en las últimas estrofas, está ganando en intensidad emocional.

(A) Tégulas.- Es la palabra reseñada con anterioridad y cuyo significado yo desconocía. Efectivamente, no viene recogida en la última edición del DRAE. Si la recoge Wikipedia ( cito textualmente).- "Trascripción al español del substantivo latino tegula: expresa la idea de cubrir..." ( el artículo sigue y es muy interesante puesto que hay otra palabra implicada). La idea que más se podría asemejar sería "teja" y es el significado que creo que Antonio quiere darle en el poema.

"Pasan los cuerpos hacia la tortura y otros que son ágiles en las
/ posturas del amor, pero la sabiduría aumenta en cálices más
/ profundos

¿Qué harías tú si tu memoria estuviera llena de olvido?(3) Todas
/ las cosas son transparentes: cesan las escrituras y cae la lluvia
/ dentro de los ojos"

(Antonio Gamoneda. Obra citada. Pág.- 141)

(3) Subrayo este verso, ya recogido en la estrofa anterior:

"¿Qué harías tú si tu memoria estuviera llena de olvido?"

Y no quiero hacer una reflexión crítica de él. Decía que el poema eestá alcanzando niveles dramáticos muy altos. Para llegar a esa reflexión el autor tiene que haber vivido de manera muy próxima el drama de la Demencia tipo Alzheimer ( o similar : demencia vascular, demencia por cuerpos de Lewy...): "y cae la lluvia dentro de los ojos ". En un enfermo ( o enferma) de Alzhemer nunca hay ira: si la hubiera no sería Alzheimer. No está escrito en los libros de medicina. Lo digo yo tras haberme sentado a verlos, a escuchalos, a mirarlos tras 26 años de profesión. Y siempre siempre he visto lo mismo: "caer la lluvia dentro de sus ojos".
Inmenso, os lo juro. Este poema es inmenso.

Y os dejos esta estrofa nada más. Pero continuaré.

"Nuestros labios envejecieron en palabras incomprensibles.



Este país no fue abrasado por un viento, no fue raído por un
/ rebaño. Ahora

la perfección de la muerte está en mi espíritu.

Hubo denuncia y extensión de sábanas. Y ciertos pasos en el
/ exterior.

Alguien ha gemido mientras la noche cae sobre la ciudad.

¿Quién ha gemido tras el cinturón de álamos, en las praderas
/ excavadas, donde los hielos ciñen el pedernal?

La ciudad ha sido rodeada por un gemido.

¡Puertas clavadas ante mí, puertas de ocultación! Siento la
/ inmovilidad espesa como una sustancia.

Un olor a mercados crece bajo el crepúsculo: grasa y laurel en las
/ maderas, tazas pesadas de alimentos, telas usadas en la carne,
/ hierros muy fríos. Todas las cosas comunican miedo y los
/ caballos agonizan en campamentos muy lejanos.

Un olor a mercados es el olor de mi alma.

Vi grandes mujeres en los patios ( y aquellas lenguas que
/ resplandecían).

Eran grandes y blancas. Más tarde en las habitaciones, lavan
/ sus cuerpos y sus cabellos descienden.

Algunas madres demasiado viejas llegan hasta los postigos pero son
/ alcanzadas por hijas vertiginosas que las devuelven a sus
/ alcobas.

Así es el interior: sábanas extendidas y las ancianas en la
/ ictericia. Algunas lloran sobre palanganas o en el resplandor de
/ los braseros.

Y la defección de los hombres: los que cruzaron terraplenes y los
/ que poseen la ciudad, estos cuya quietud es mortífera;

estos - bajo los cueros aceitados- cuya mirada tiene la agilidad
/ del mercurio y andan protegidos por la belleza de las acacias

( los que silban en un cuchillo y los que alumbran en los
/ almacenes,

los que describen rostros con ademanes muy exactos).



De los desvanes baja un clamor de palomas. Es el sonido de mi
/ infancia.

Mis propiedades son débiles: un tejido de cáñamo, leche - azul en
/ los bordes- y la contemplación de los espías.

Éstas son las huellas de mis ojos, los contenidos de mi alma.

¿Quién ha gemido tras el cinturón de álamos? Hay noticias de
/ invierno y los perro copulan tristemente sobre la escarcha.

Una rama de espino ha penetrado en mi corazón y sin embargo no
/ he despertado de este sueño.



La realidad se ahuyenta en estos labios tan sólo expertos en formas
/ invisibles.

Cesa el fermento de mi infancia; cesa el horror y su oquedad es
/ grande.




Tierra desposeída de sus tumbas, madres encanecidas en el vértigo.

Es lo que queda de mi patria.



La acusación estuvo demasiado tiempo dentro de tu lengua. Eres
/ tardío como las sustancias destinadas a la dulzura.

Lames mi piel hasta que brotan signos y tus sollozos forman bóvedas
/ en mi corazón

pero mi piedad está habitada por animales muy esbeltos, por anima-
/ -les persuasivos y otros versados en la fugacidad.

Sólo tú eres exterior y horrible: el que robó mis actos y no
/ duermes;

el que está ciego en la serenidad"

(Antonio Gamoneda. Descripción de la mentira en Antología Poética.
Págs.- 141-145)

"¿Quién habla en ti, quién es la forma de tu rostro?

Guárdate de quien se alimenta con el perfume del suicidio, guárdate
/ de mí porque la negación ha tocado mi cuerpo.

Tu alma está fatigada pero eres alto en la fatiga: hablas a dioses
/ extinguidos.

No hay semejanza en ti: hay infección y fuego dentro d tu lengua y
/ la pureza es tu enfermedad.

Subes hasta un lugar de espinos; tocas el borde del crepúsculo.

Eres tardío como las sustancias destinadas a la dulzura. No hay
/ semejanza en ti.



Yo he puesto días en mis ojos y mis acciones son como el olor de
/ la resina en un lugar profundo.



Sólo vi luz en las habitaciones de la muerte.



Un sonido en la muerte: mis oídos llenos de luz y las palomas
/ elevadas sobre los actos de la policia.

Como en aguas coléricas, mi rostro es bello en este acero:
/ ah multitud sin tasa, felicidad de la ira.

¿ Y tú te ocultas, el habitante de mi alma?

¿ Quién miente aún en el dormitorio de tu madre?"

(Ant. Gamoneda. Obra señalada: 145-147)

"Hoy es el día de las reflexiones luminosas, el día de despreciarme
/ dentro de tus ojos.

He temido tanto a la vida como a la muerte; hay luz sobre esas
/ cajas vacías,

piedras en la cabeza de mi madre,

largas acusaciones bajo las cifras del invierno.


Los funcionarios y las viudas enmascaradas con la piel de sus
/ hijos escribieron páginas incandescentes y tú dormías en sus
/ brazos; tú descansabas en sus brazos y la escritura penetró en
/ su vientre.

Tú no soñabas con la libertad.

Hoy es el día de la reflexión luminosa y los vencejos contemplan
/ la expiación en las terrazas donde la claridad es perfecta,

donde me obligas a la lucidez sin causa.

Más la dulzura azul -aquella sombra en el mercurio- y las alondras
/ que acudían a las ubres atormentadas se han deslizado dentro de
/ tus ojos.

Tú eres el día del desprecio.



La contradicción está en mi alma como los dientes en la boca que
/ habla de misericordia.

La confusión está en mi alma y pienso en ríos al deslizar mi lengua
/ en las mujeres que se apiadan de mis ácidos. Mi salud es lasciva
/ ante esas grandes ventanas.

Estos enjambres...Y la blancura de tu espalda, el caminante ciego
/ que va delante de mí, o, en esas tazas pulimentadas por el
/ vértigo, el alimento azul, el preparado para la hora de la
/ muerte.

Largos silbidos llegan desde los patios. Yo escucho hasta la
/ hora más tardía y el mundo es oquedad y la hermosura de los
/ adulterios hierve en el fondo de los vasos de la noche.

Así es la víspera de un día. La leche anuncia la mañana.

¿Quién ha entrado en mis oídos?



El olvido es mi patria vigilada y aún tuve un país más grande y
/ desconocido.


He retornado entre un silencio de párpados a aquellos bosques en
/ que fui perseguido por presentimientos y proposiciones de
/ hombres enfermos.

Es aquí donde el miedo ve la fuerza de tu rostro: tu realidad en
/ la desaparición

(que se extendía como la lluvia en el fondo de la noche; más lenta
/ que la tristeza, más húmeda que labios sobre mi cuerpo).

Eran los días grandes de la traición.



Me alimentaba la fosforecencia. Tú creaste la mentira entre las
/ piernas de mi madre; no existía el dolor y tú creaste la
/ compasión-

Tú volvías a las hortensias

y sollozaste bajo la lente de los comisarios.

Yo vi la luz de la inutilidad.



Mi boca ves fría en las plegarias. Este relato incomprensible es
/ lo que queda de nosotros. La traición prospera en corazones
/ inviolables.


Profundidad de la mentira: todos mis actos en el espejo de la
/ muerte. Y los crbones resplandecen sobre la piel de héroes aún
/ despiertos en el umbral de la imbecilidad.

Y ese alarido entre cristales, esas heridas que no son visibles
/ más que en el instante del amor...



¿Qué hora es ésta, que yerba crece en nuestra juventud?"

(A. Gamoneda. Descripción de la mentira. En Antología Poética. Págs.-149-152)

Aquí ha concluído "Descripción de la mentira". Puede ser - y creemos que debe ser- considerado como un único poema con una temática específica: el discurrir "hagiográfico" de la juventud del poeta desde un discurso en su mayor parte oscuro e hiriente y, en pocas ocasiones esperanzador, o al menos cicatrizante. Hasta la última pregunta del poema "¿Qué yerba crece en nuestra juventud?".
Del poema habría que analizar también la forma, la estructura. Novedosa, desde luego, para el momento en que se escribe - o que se empieza, 1975.1976, aunque se concluyera en el 2003-. No era una forma habitua. verso libre, sí...tan libre que sobrepasa límites para, en ocasiones , caer en lo "prosáico". Y lo entrecomillo porque es una crítica fácil. La lírica de este poema está en el drama que contiene. Y ese drama no precisa ser encorchetado. Además no es un poema épico al estilo de "Ebtreguerras" de Caballero Bonald. Llega a ser, a veces, en sus proposiciones hasta "miserable" por lo desesperanzador.... pero justo en los momentos en los que no parece haber salida una pequeña luz - el amor siempre. revitaliza la esperanza dormida. Es un poema que yo recomiendo leer más de una vez. Y sacar las conclusiones propias.

Volveremos a La promoción Poética de los 5o con otros autores. Pero esperaremos unos días. Gracias

Creo que es hoy, María, cuando se hace entrega del Premio Cervantes de las letras - si no me equivoco este premio lo recibió un insigne, por humilde, escritor en tu lengua : Pepe Saramago-. Es el premio de mayor prestigio - no sé si el mejor dotado economicamente- en lengua hispana. Y el año pasado, 2012, se le concedió a José Manuel Caballero Bonald. La entrega, no estoy seguro, es hoy o mañana. Con ese motivo voy a retomarlo con unos poemas. No recuerdo si alguno de ellos será repetido. En caso de que así fuera su relectura siempre será provechosa. Al menos eso espero :

"TODO LO QUE HE VIVIDO

Todo lo que he vivido, todo
lo que he salvado vigilantemente
del voraz exterminio de los días,
todo cuanto yo fui, hoy os lo ofrezco,
ojos que seguiréis el rastro de estas letras,
pechos que olvidaréis mi reclamo del mundo,
mi modo de vivir, todo os lo doy ahora
lo mismo que os daría mi palabra final
en su declinación de certidumbre única.

Es mi memoria lo que os pongo
en las manos, cuanto conozco mío:
la integridad perpleja de mi vida , también
la vida de los otros hecha a mi semejanza,
apenas la profética ceniza
de un tiempo ardiendo entre furiosas órdenes,
bajo la servidumbre de intolerables leyes.

Cada día y su huella, cada amor que me hizo,
fulgen aquí, compiten, se atestiguan,
restañan todavía sus agrietados bordes,
erigen su verdad de igual manera
que un hombre solo funda cuanto ama.

Desde mi propio sueño, desde
mi libertad de estar soñando, desde el fondo
de mí, que soy igual que todos,
que aprendo igual que todos a rescatar el tiempo,
traigo mi voz y mi holocausto,
la vaga historia de mis conjeturas,
para que no esté sola mi palabra,
para poder vivir quizá
desde el merecimiento en que la creo"

(J.M. Caballero Bonald : Las adivinaciones, 1952. En "La promoción poética de los 50". Espasa. Págs.- 129-130)

"BIOBIBLIOGRAFÍA

Cuando busco al que fui, qué hacinamiento
de vacilaciones, atisbos,
pistas falsas, presagios, averías
de la memoria, ardides
neutralizados por la incertidumbre.

A veces soy alguno
de esos esquivos personajes
que repentinamente me suplantan,
y aveces sólo soy
como un antecesor del que nunca seré
o acaso ese inconstante buscador de respuestas
que acaba siempre defraudado
por la futilidad de sus respuestas.

Sin embargo, mi historia personal
poco tiene que ver con esa historia:
también yo soy aquel que nunca escribe nada
si no es en legítima defensa"

(J.M. Caballero Bonald. Diario de Argónida , 1997. En La Promoción Poética de los 5o. Espasa. Págs.- 151.152)

"ANEXO TESTAMENTARIO

He dado pruebas de estar vivo,
muchas y renuentes,
- - - - - - - - - pero no
de atravesr a tientas la frontera
desde la que se atisban
los detrimentos del futuro.

Lo que aún no ha ocurrido
me está esperando en las titubeantes
encrucijadas
de la indefensión.
- - - - - - - - - Pero ya para qué:
mi palabra coincide con esos menoscabos
vertiginosos de los días.

Metáfora incesante
segundo tras segundo sucediéndose,
péndulo funeral que se acompasa
a los latidos de mi corazón"

(J.M. Caballero Bonald. Manual de infractores. Seix Barral. Pág.-69)

"¿quién conoce entre todos sus coetáneos al limpio de
// corazón
al honorable al probo al varón justo a cuyo tribunal
// acuden
los reos de estar vivos para saber si todavía siguen
// estándolo?
¿o al contrario quién conoce al altivo al afectado de
// trastorno bipolar
al más enemistado con las docilidades al transgresor por
// pura obstinación
al que procura redimirse abrirse paso abrirse paso
entre las sibilinas frondas que taponan las cámaras del
// odio
donde yacen los cuerpos que han ido contagiándose de la
// gran mentira?"

(J.M. Caballero Bonald. Entreguerras. Seix Barral. Pág.- 206)

Y he de confesar mi "cara de culpa postergada": y eso, precisamente eso, por anticiparme, sin recordar que Caballero Bonald es "un pillo donde los haya". Yo estaba contento por la concesión del Premio Cervantes 2012. Recordaba además a insignes autores que le precedieron ( Gamoneda, tan discutido, Juan Gelman...). Pero esa alegría, injustamente , fue transformándose en dosis considerable de mal humor - cuando no tristeza - al ver la recepción ofrecida por el Rey la noche previa a la entrega del premio al autor de "Entreguerras". Al día siguiente, es decir ayer, de una forma intuitiva me solidaricé con los alumnos que esperaban a Caballero Bonald con banderas tricolores en la puerta de la Universidad. Alguna cara de disgusto... Y José Manuel con su cara , expresión impenitente de picardía e inteligencia. Yo, insisto, con mis dudas y mi aversión. Aquellas, incluso, sin tener presente la "consecuencia moral" de un autor por mí preferido. Mi aversión y mi repulsa, también intuitivas, cada vez que veo la representación de la monarquia.
Y expresado todo ello, y mi ingenuidad - no por más solidaria con los manifestantes menos ingenua-

Bueno,bueno,mi querido Pascual,tengo que pedirte perdón por no haber pasado antes por este lugar,hay mucho bueno por aquí y creo que voy a comenzar a disfrutarlo.
Gracias por tu dedicación y besos,señor poeta.

(ese "mas" previo debe llevar tilde "más") viendo en TVE el acto en ciertos momentos me llamó la atención la cara estupefacta de Felipe y la no menos estupefacta, e incluso de "mala leche" -perdonar la vulgaridad, pero es popular y certera- de Mariano Rajoy al escuchar las palabras de Jose Manuel: Glosando a Quevedo; San Juan de la Cruz... Y MANUEL AZAÑA. Glosando a Pavese. Glosando, sobre todo, a DON MIGUEL DE CERVANTES. Y glosándose a sí mismo: reafirmándose como un poeta de hoy al que nada de lo que ocurre le es ajeno, por más dolor de estomago que eso pueda provocar en académicos, autoridades. Y, fundamentalmente, en Felipe y Rajoy: ¡Qué tomen Mabogastrol! ha debido pensar, certeramente Caballero Bonald.

"Y no deseo finalizar este recuerdo de emociones sin hacer una mención fugaz de mis débitos personales con la poesía, ese engranaje de vida y pensamiento que tanto amó Cervantes y que tan exiguas recompensas le proporcionó. La poesía es también algo de INDEMNIZACIÓN SUPLETORIA DE UNA PÉRDIDA.Lo que se pierde evoca en sentido lato lo que la poesía pretende recuperar, esos innumerables extravíos de la memoria que la poesía reordena y nos devuelve enaltecidos, como para que ASÍ PODAMOS DEFENDERNOS DE LAS AVERÍAS DE LA HISTORIA. Afirmaba PAVESE que LA POESÍA ES UNA FORMA DE DEFENSA CONTRA LAS OFENSAS DE LA VIDA y ese es para mí un veredicto inapelable. SIEMPRE HAY QUE DEFENDERSE CON LA PALABRA DE QUIENES PRETENDEN QUITÁRNOSLA. SIEMPRE HAY QUE ESGRIMIR ESA PALABRA CONTRA LOS DESAHUCIOS DE LA RAZÓN" ( José Manuel Caballero Bonald. Discurso en la recepción del Premio Cervantes. Extracto)
Los subrayados son míos).

Qué lindo Pascual lo que decís: lo que dijo el autor, la cita de Pavese y tu lúcida reflexión personal. Seguiré con más detenimiento a este autor.
Besitossssssssss, amigo, y graciasssssssssss

Si tengo tiempo - siempre tan apresurado y otras tan escaso- le dedicaré un poco más a Caballero Bonald; a ese discurso - que no tiene desperdicio- y a una entrevista qe le hicieron en mayo de 2012. Pero insisto el tiempo lo llevo mal. Esta mañana han intervenido de cadera a la madre de Josefina. Y precisa toda nuestra atención.
Gracias, Cecilia.

JAIME GIL DE BIEDMA

Peeping Tom 

Ojos de solitario, muchachito atónito
que sorprendí mirándonos
en aquel pinarcillo, junto a la Facultad de Letras,
hace más de once años,
al ir a separarme,
todavía atontado de saliva y de arena,
después de revolcarnos los dos medio vestidos,
felices como bestias.
Te recuerdo, es curioso
con qué reconcentrada intensidad de símbolo,
va unido a aquella historia,
mi primera experiencia de amor correspondido.
A veces me pregunto qué habrá sido de ti.
Y si ahora en tus noches junto a un cuerpo
vuelve la vieja escena
y todavía espías nuestros besos.
Así vuelve a mí desde el pasado,
como un grito inconexo,
la imagen de tus ojos. Expresión
de mi propio deseo.

Gracias por Gil de Bedia, querido doc!!!!!!!!!!!!!!!
Me encanta siempre leerlo.
Besosssssssss para vos y para la querida Jose

Gracias, Cecilia por estar ahí y por tus palabras.

Besos.