XI. SONETOS POETAS ESPAÑOLES SIGLO XX (VI)

    BIOGRAFÍA   

Eduardo González Suárez nació en Mieres (Asturias) España, el año 1928 aunque después de pocos años fijó su residencia en Madrid.
Ya desde niño, sintió una fuerte inclinación hacia la poesía. A la temprana edad de once años, como premio estudiantil recibió un libro; era el primer libro de poesías que cayó en sus manos; una  antología del poeta argentino Leopoldo Lugones, la cual, le fue censurada inmediatamente por un profesor con el pretexto de que no era apto para su edad.

Pero, fue el libro RIMAS Y LEYENDAS de Bécquer quien consiguió abrirle a las múltiples percepciones poéticas, tomándolo para sí como punto de referencia y reafirmándose en el afán de hacerse poeta.

En su primera juventud, cursó estudios de Graduado Social. Y con esos conocimientos se puso a trabajar: “Primum vivere, deinde philosophare”
(Lo principal es vivir y luego filosofar).

Ejerció como psicólogo en varias empresas y finalmente logró la licenciatura en Ciencias de la Información en la Universidad Complutense,—periodismo—, y trabajó en dos empresas periodísticas.
Ejerció como Profesor Auxiliar de Redacción Periodística en la Universidad Complutense y como psicólogo en una universidad privada, la Mississippi, de Madrid, explicando Introducción a la Psicología.

Ha publicado algunos libros de poesía, como: “CANCIONES DE LA VIDA”  y  “SOMBRA DE ESPUMAS MUERTAS EN LAS ROCAS”.  Y libros de prosa “CALLE LA DEL RIVERO” y “AQUELLOS ÍDOLOS ERAN DE BARRO”,  con las que llegó a ser finalista del Premio de Novela Corta Casino de Mieres en 1985 y en 1991. En 1987 Ediciones Mondadori le publica un cuento para niños con el título de “UN TRASGO RISUEÑO EN LA BIBLIOTECA”. Su última obra publicada fue “CENTRO DE ASTURIANOS DE MADRID”.
Ha publicado en múltiples revistas y periódicos, tanto poemas como artículos de diversa índole.

      COMENTARIOS A SU OBRA      

La obra poética de Eduardo gira entorno a la lírica de estilo becqueriano.  Fue tal el deslumbrante impacto que le produjo el conocimiento del gran poeta del romanticismo español, que muchas de sus poesías nos hacen recordar un leve pero inconfundible aroma de aquellas poesías de Gustavo Adolfo.

Nuestras páginas se engalanan con las bellas poesías de Eduardo, que es un literato gran conocedor de los arcanos que conducen hacia ese recóndito lugar en donde moran las musas de la auténtica poesía.

El dominio de los diferentes estilos de estrofas y medidas, se hace patente en su gran obra, pero tal vez el clásico soneto endecasílabo es lo que maneja con mayor soltura y brillantez.  Aquí damos testimonio de ello con esta cuidada selección de lo más característico de su obra poética.

 
 
 

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AUTÉNTICA POESÍA - Herrera/Muñoz - 2001
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