XI. SONETOS POETAS ESPAÑOLES SIGLO XX (VI)

SONETOS ESPAÑOLES DEL SIGLO XX


MARÍA DEL CARMEN GUZMÁN ORTEGA

La Palma del Condado. Huelva. Siglo XX
Profesora.
Poeta hallada en Internet.



ESTRELLA

Desde la sombra amable de la estancia
el cielo con su luz se transfigura
y como gema en la vitrina oscura
brilla sobre el abismo en la distancia.

Deja escapar el aire su fragancia
como una flor pletórica y madura
y cuando el Sol se pone ya procura
mostrar como el diamante su sustancia.

Sobre la negra noche el diminuto
broche, como una joya de diseño
en terciopelo negro e impoluto.

¿De qué sustancia están hechos los sueños?
¡qué materia palpita en le minuto
en que todos los astros son risueños?

SONETOS ESPAÑOLES DEL SIGLO XX


MARÍA DEL CARMEN GUZMÁN ORTEGA

La Palma del Condado. Huelva. Siglo XX
Profesora.
Poeta hallada en Internet.




CALOR

Se derriten poemas sobre el ardiente asfalto
y las palomas buscan imposibles veneros,
crepitan las chicharras, tenaces avisperos
se lanzan en bandadas, voraces, al asalto.

Ni un soplo refrescante. El Sol está tan alto
que enloquecen y aplana sus rayos traicioneros,
las flores agonizan sin agua en los floreros
y desafina un ave con su voz de contralto.

Ni un leve movimiento del aire en los tejados.
Los pies están buscando frescor de una baldosa
y el sudor se resbala pastoso en tus costados.

El calor galvaniza, te aplasta como losa,
derrite tus ideas. Estos cuarenta grados
queman pieles, claveles, mi poesía y mi prosa.

SONETOS ESPAÑOLES DEL SIGLO XX


MARÍA DEL CARMEN GUZMÁN ORTEGA

La Palma del Condado. Huelva. Siglo XX
Profesora.
Poeta hallada en Internet.



VIENTO


Un frenético llanto de clarines,
un repicar de dedos -cascabeles
sobre el cristal- danzando en los cordeles
coreografía de trapos bailarines.

Es el alma de marzo, que a maitines
llama los descreídos y a los fieles,
construye catedrales y babeles
y hace aullar a famélicos mastines.

Un tremolar vibrante, un alboroto
de aludas en tropel bajo el felpudo
y un ronco resonar de mar remoto.

El viento hace sonar su grito agudo,
un alar desgajado, un árbol roto
y el jazminero atónito y denudo.

SONETOS ESPAÑOLES DEL SIGLO XX


MARÍA DEL CARMEN GUZMÁN ORTEGA

La Palma del Condado. Huelva. Siglo XX
Profesora.
Poeta hallada en Internet.


MAÑANA


La luz de la mañana se cuela por los ojos,
un bostezar ansioso del aire en la antenas,
los pájaros ensayan agudas cantinelas,
bostezan las persianas, protestan los cerrojos.

Al Este se vislumbra destellos de los rojos
horizontes marinos. Circulan por las venas
la sangre, los proyectos, las dichas y las penas.
y las mantas sacuden del sueño los despojos.

Con el soplo del viento se levanta la bruma
y el ámbito se tiñe de un tenue claroscuro
sobre el mar que dormita meciéndose en la espuma.

Una bruja impaciente ha lanzado un conjuro
sobre el papel dormido. Se despierta la pluma
y trepan los sonetos por la yedra del muro.

SONETOS ESPAÑOLES DEL SIGLO XX


MARÍA DEL CARMEN GUZMÁN ORTEGA

La Palma del Condado. Huelva. Siglo XX
Profesora.
Poeta hallada en Internet.



FRIO


Están nevando versos en la playa
y de rimas se cubre la azotea,
en el atril tirita una corchea
y en la clave de luna se acaballa.

Hiere el viento en esquirlas de metralla
y por entre las tejas se pasea,
desciende por la negra chimenea
y llega hasta mi gélida atalaya.

El frío, gota a gota, poco a poco
va formando las notas de este canto
que es la vieja canción que siempre evoco.

Sobre el alféizar frío cae el llanto
del cielo. Me congela un viento loco
y cierro mi balcón a cal y canto.

SONETOS ESPAÑOLES DEL SIGLO XX


MARÍA DEL CARMEN GUZMÁN ORTEGA

La Palma del Condado. Huelva. Siglo XX
Profesora.
Poeta hallada en Internet.



TERRAZA

Desde el amplio resol de la terraza
un pájaro me mira con recelo,
las alas extendidas por el suelo,
creyéndose que soy una amenaza.

Le pongo pan migado en una taza
y al calor de mi cándido pañuelo
encuentra su refugio y su consuelo
y en el sol de la tarde se solaza.

Llegó tan miserable y malherido,
en un vuelo rasante y temerario
que olvidó su pretérito y su nido.

La terraza es jardín y santuario
de pájaros y flores del olvido
y un presente feliz y hospitalario.

SONETOS ESPAÑOLES DEL SIGLO XX


MARÍA DEL CARMEN GUZMÁN ORTEGA

La Palma del Condado. Huelva. Siglo XX
Profesora.
Poeta hallada en Internet.


SILENCIO

Cuando el cuerpo se calla el alma canta.
Si se siente acosada por el ruido
un demonio se instala en el oído
y a las musas histéricas espanta.

La nota en el atril se solivianta
y el diapasón confunde su latido,
se encrespan el bemol y el sostenido
y la voz del poeta se quebranta.

Déjame ser llevada por tu brisa,
bendito, benditísimo silencio
y ser de tu esplendor sacerdotisa.

El sonar de tus voces reverencio
como a un antiguo dios, porque sumisa
a ser tu esclava fiel yo me sentencio.

Cuando el cuerpo se calla el alma canta.

No se precisa decir nada más...

Besos . ¿Me avisrás cuando termines?

Muchas gracias, amigo mío y sí, no te preocupes que te avisaré.
Besos y buen día

SONETOS ESPAÑOLES DEL SIGLO XX


MARÍA DEL CARMEN GUZMÁN ORTEGA

La Palma del Condado. Huelva. Siglo XX
Profesora.
Poeta hallada en Internet.



MADRUGADA

Cegadora e intensa llamarada
en los cristales límpidos de enfrente,
cuando la calle está quieta y silente
bajo el fugaz albor de la alborada.

Se me quiebra la luz en mi almohada
cuando el Sol se despierta por Oriente,
que ya encontré por fin mi confidente:
mi soledad querida y encontrada.

A caballo en la antena del tejado
veré pasar la vida como un río
en un desasosiego atareado.

Seré la capitana de un navío
y lo demás me tiene sin cuidado
con tal de que navegue a su albedrío.

SONETOS ESPAÑOLES DEL SIGLO XX


MARÍA DEL CARMEN GUZMÁN ORTEGA

La Palma del Condado. Huelva. Siglo XX
Profesora.
Poeta hallada en Internet.




INSPIRACIÓN


La rabia almacenada en la despensa
y el coraje guardado en el trastero,
los versos dormitando en el ropero
y la musa en el hall medita y piensa.

Llora sobre el papel la lluvia densa
en un fuerte y espléndido aguacero.
Un soneto se cuelga del alero
y el miedo del pasado se condensa.

Una rima furtiva se me escapa
por el hueco falaz de la gatera
y con la lluvia un hálito se empapa

En la cumbre que oculta la escalera
en un rincón oscuro se agazapa
el pensamiento hostil de la pantera.

SONETOS ESPAÑOLES DEL SIGLO XX


MARÍA DEL CARMEN GUZMÁN ORTEGA

La Palma del Condado. Huelva. Siglo XX
Profesora.
Poeta hallada en Internet.



AUTOMÓVILES

En la distancia rugen los motores
con su urgencia de humana servidumbre,
cadena que llevamos por costumbre
y nos hace sentir conquistadores.

Palanquines de pobres y señores
que te llevan volando hasta la cumbre
para luego quedar en sucia herrumbre
-samaritanos o depredadores-.

Aparcados al borde de la acera,
cubiertos por el polvo nauseabundo
añoran el olor a carretera.

Un bólido febril y trotamundo
terminó su frenética carrera
en el vórtice eterno de un segundo.

SONETOS ESPAÑOLES DEL SIGLO XX


MARÍA DEL CARMEN GUZMÁN ORTEGA

La Palma del Condado. Huelva. Siglo XX
Profesora.
Poeta hallada en Internet.




MUSICA

Bajo la tenue, débil luz difusa
ha saltado al papel una corchea.
Como un ave posada en la azotea
trina al viento con una semifusa.

Y loca por cantar, estoy con-fusa
y con una gentil semicorchea,
que este baile de locos me marea
y para no bailar no tengo excusa.

Sin avisar se cuela por la blonda
de mi sostén. Se encienden los faroles
y el pentagrama allí forma una onda.

Me abrazan sostenidos y bemoles,
forma un dúo conmigo una redonda
y en el cenit se funden arreboles.

Gracias, Lluvia.. Me gustan los sonetos que estás poniendo.


MUSICA

Bajo la tenue, débil luz difusa
ha saltado al papel una corchea.
Como un ave posada en la azotea
trina al viento con una semifusa.

Y loca por cantar, estoy con-fusa
y con una gentil semicorchea,
que este baile de locos me marea
y para no bailar no tengo excusa.

Sin avisar se cuela por la blonda
de mi sostén. Se encienden los faroles
y el pentagrama allí forma una onda.

Me abrazan sostenidos y bemoles,
forma un dúo conmigo una redonda
y en el cenit se funden arreboles.




Besos.

Seré la capitana de un navío
y lo demás me tiene sin cuidado
con tal de que navegue a su albedrío.

Me gusta esta autora!!!!!!!!!
Gracias lluvia. Besossssssssssss

Sí, amigos, la verdad es que me ha sorprendido, su manera llana de versar me llega y, también me gusta mucho.
Gracias, Pascual, Ceci, por acompañar-nos.

Besos para ambos.

SONETOS ESPAÑOLES DEL SIGLO XX


MARÍA DEL CARMEN GUZMÁN ORTEGA

La Palma del Condado. Huelva. Siglo XX
Profesora.
Poeta hallada en Internet.



SIESTA

Esta tarde me aplasta la pereza,
no estoy para sonetos ni canciones,
a mi musa le he dado vacaciones
y a descansar he puesto a la agudeza.

Hoy no puedo escribir. Esta tibieza
del aire me produce sensaciones
extrañas. Multiplico los borrones,
que la pluma también se despereza.

Me asalta sin control la somnolencia,
mi mano perezosa se amotina
con su lánguida y gran desobediencia.

Ya o puedo ejercer la disciplina,
que en la línea sutil de su cadencia
la fuerza de mi párrafo declina.

SONETOS ESPAÑOLES DEL SIGLO XX


MARÍA DEL CARMEN GUZMÁN ORTEGA

La Palma del Condado. Huelva. Siglo XX
Profesora.
Poeta hallada en Internet.



SONETO DE ANDAR POR CASA


En bata, delantal, por los pasillos,
en medio de una olla y un cacharro,
mientras lavo, cocino, limpio y barro,
este humilde soneto a lo sencillo.

Al inseguro mástil del cepillo
como un náufrago terca yo me agarro.
Nadando en este mar de polvo y barro
quiero dar a mi verso limpio brillo.

Es fácil componer bellos poemas
cuando el silencio borra la premura
que mancha los pasillos de tu venas.

¿Quién puede hacer un himno a la hermosura
cuando el guiso en la olla se te quema
o no cabe en el cubo más basura?

SONETOS ESPAÑOLES DEL SIGLO XX


MARÍA DEL CARMEN GUZMÁN ORTEGA

La Palma del Condado. Huelva. Siglo XX
Profesora.
Poeta hallada en Internet.



SONETOS URBANOS


Sonetos de la calle y la avenida,
de la plaza, la fuente y el paseo,
del amor, de la ducha y el deseo
y que sangran del centro de mi herida.

Declaro que a lo largo de mi vida,
como en un singular vagabundeo,
por mis calles internas merodeo
en una alucinante zambullida.

Mis sonetos de piedra calcinada
por los tórridos vientos del verano.
Mis sonetos de nieve y llamarada.

Como en tierra baldía yo me afano
en sembrar mi canción en la calzada
para que brote así mi verso urbano.

SONETOS ESPAÑOLES DEL SIGLO XX


MARÍA DEL CARMEN GUZMÁN ORTEGA

La Palma del Condado. Huelva. Siglo XX
Profesora.
Poeta hallada en Internet.



EL METRO

La ciudad se despierta tragando y escupiendo
ciudadanos dormidos, corderos y alimañas.
Una sierpe de hierro les muerde las entrañas
y sus huesos tritura con pavoroso estruendo.

La ciudad recompone las prendas de su atuendo,
despereza ilusiones, sacude telarañas,
-cortinas de la noche- persigue musarañas
por el ámbito oscuro de su foso tremendo.

Condenado a la noche, feroz y testarudo,
en busca de las luces, huyendo de sí mismo,
sólo encuentra los ayes de su lamento agudo.

Atrapada en su vientre yo me confundo y sudo
y busco entre la sombras eternas de su abismo
el arco luminoso de un cálido saludo.

SONETOS ESPAÑOLES DEL SIGLO XX


MARÍA DEL CARMEN GUZMÁN ORTEGA

La Palma del Condado. Huelva. Siglo XX
Profesora.
Poeta hallada en Internet.



SOMBRA

Te me quedaste, sombra, rezagada
en una calle oscura y maloliente,
mezclada entre la sombra de la gente
y dejándome al punto desombrada.

Te busco en el albor de la alborada
cuando el sol se me dobla por la frente
o se me quiebra en luna decreciente
la blanca soledad de mi almohada.

Desdibujaste ingrata mi figura
y tiemblo en le hervor del epicentro
donde la luz me ciega y me tortura.

En la cima del vértice me encuentro,
que añorando el frescor de tu negrura
en busca de tus sombras yo me adentro.

SONETOS ESPAÑOLES DEL SIGLO XX


MARÍA DEL CARMEN GUZMÁN ORTEGA

La Palma del Condado. Huelva. Siglo XX
Profesora.
Poeta hallada en Internet.



SOBRE EL ASFALTO


Me dejé el corazón sobre el asfalto,
aparcado en el borde de la acera,
pero llegó la grúa traicionera
y lo atrapó en sus garras por asalto.

Mi corazón latió con sobresalto
al sentirse arrastrar por la ladera
de un monte de chatarra. ¡Qué quimera
dejar mi corazón subir tan alto!

Imposible encontrar aparcamiento,
se le agotó por fin la gasolina
y sin voz se ha quedado su bocina.

Oxidándose al paso de un mal viento,
sin freno, sin capó, sin alimento,
mi corazón se muere en una esquina.

SONETOS ESPAÑOLES DEL SIGLO XX


MARÍA DEL CARMEN GUZMÁN ORTEGA

La Palma del Condado. Huelva. Siglo XX
Profesora.
Poeta hallada en Internet.



EL SEMAFORO


Te mira cada vez un solo ojo
de su acerada testa de gigante.
Luneta vertical, siempre cambiante,
manejando las vidas a su antojo.

Un rechinar de llantas. Guiño rojo.
Un metálico y viejo rocinante,
un daltónico bólido arrogante
y una alfombra tal vez como despojo.

Sin meta ni laurel, carros de fuego
entre la doble fila de un rebaño
envuelta en un sutil desasosiego.

Y en este mundo absurdo tan extraño
un cánido salvaje y andariego
busca en vano la sombra de un castaño.

SONETOS ESPAÑOLES DEL SIGLO XX


MARÍA DEL CARMEN GUZMÁN ORTEGA

La Palma del Condado. Huelva. Siglo XX
Profesora.
Poeta hallada en Internet.



ARBOL

Te esperaba clavada tantos años
junto al húmedo cauce de esmeralda
que me crecieron ramas en la espalda
y no me son los pájaros extraños.

La nieve cubre ya los aledaños,
tiritan mis raíces bajo el halda
y se marchan mis hojas por la gualda
corriente de la mar de tus engaños.

Porque soy un olivo, mi corteza
resistirá los fieros elementos
aunque agote la savia su tristeza.

De pie me secaré, con la cabeza
firme sobre mis tronco, si los vientos
me envuelven en rumores de belleza.

SONETOS ESPAÑOLES DEL SIGLO XX


MARÍA DEL CARMEN GUZMÁN ORTEGA

La Palma del Condado. Huelva. Siglo XX
Profesora.
Poeta hallada en Internet.



EL BOSQUE


Este bosque detrás de mi ventana,
un utópico sueño inexistente,
ha surgido en la noche de repente
como brota la vida en la sabana.

Lo descubrí de pronto una mañana
como la luz que asoma por oriente,
y posado en un mar de tierra ardiente
se atrevió a convertirse en isla urbana.

O trajeron las hadas con el viento,
los regaron los gnomos con su aliento
y lo curtió con fuerza el aire bronco.

Yo lo riego también con mi lamento
que late en cada rama, en cada tronco
de este sueño de asfalto y de cemento.

SONETOS ESPAÑOLES DEL SIGLO XX


MARÍA DEL CARMEN GUZMÁN ORTEGA

La Palma del Condado. Huelva. Siglo XX
Profesora.
Poeta hallada en Internet.



EL SOTANO


Tendré que descender las escaleras
hasta el rincón oscuro y polvoriento
donde no llega el hálito del viento
desde quien sabe cuantas primaveras.

Sacudiré con fuerza las esteras
de esta abulia mortal en que me siento
a dejarme llevar del pensamiento
por lejanas, fantásticas esferas.

Revolveré los trastos apilados
en el rincón de todos mis olvidos,
en el rincón de todos mis pecados.

Y mortalmente herida en sus costados
encontraré mi alma y sus latidos
y todos mis anhelos olvidados.

ARBOL

Te esperaba clavada tantos años
junto al húmedo cauce de esmeralda
que me crecieron ramas en la espalda
y no me son los pájaros extraños.

La nieve cubre ya los aledaños,
tiritan mis raíces bajo el halda
y se marchan mis hojas por la gualda
corriente de la mar de tus engaños.

Porque soy un olivo, mi corteza
resistirá los fieros elementos
aunque agote la savia su tristeza.

De pie me secaré, con la cabeza
firme sobre mis tronco, si los vientos
me envuelven en rumores de belleza.


Precioso.

Ya sabes, querida amiga. Cuando termines con esta autora, cierras y abres nuevo capítulo con las letras H e I.

Besos.

Gracias, Pascual y sí, en eso quedamos; cierro y abro el nuevo.
Buen día y besos.

SONETOS ESPAÑOLES DEL SIGLO XX


MARÍA DEL CARMEN GUZMÁN ORTEGA

La Palma del Condado. Huelva. Siglo XX
Profesora.
Poeta hallada en Internet.



AUTOPISTA


Tus manos aferradas al volante
mientras ruedas veloz por la autopista
y te lanzas febril a la conquista
de una meta lejana y fascinante.

Una altanera chispa en tu semblante
de caballero audaz. Como exorcista
ahuyentas los demonios de tu vista
que te impidan seguir hacia adelante.

Soldado sin honor, sin un lamento
la Eternidad se funde en la moviola
con un leve y sutil arrobamiento.

Y en la efímera cumbre de un momento
crece la candidez de una amapola
sobre la piedra gris del pavimento.

SONETOS ESPAÑOLES DEL SIGLO XX


MARÍA DEL CARMEN GUZMÁN ORTEGA

La Palma del Condado. Huelva. Siglo XX
Profesora.
Poeta hallada en Internet.



AEROPUERTO

Estas penas que llevo en mi equipaje
a través de las nubes que atravieso,
me obligan a pagar un sobrepeso
en cada inexplorado aterrizaje.

Si me quedo varada en el paisaje,
seducida en estúpido embeleso,
perderé la llamada de regreso
y el último bastión de mi coraje.

He de llagar al próximo aeropuerto
sin pasar los controles de la aduana
o condenarme al último desierto.

Y al divisar la nieve tramontana
me armaré de valor, a ver si acierto
a tirar mi dolor por la ventana.