La ley superior
Hay tres indicaciones de la verdadera
generosidad: permanecer firme sin resistir,
alabar sin la emoción de la generosidad y dar
antes de que se nos pida.
(Maaruf Karkhi)
Una de las producciones más interesantes de la literatura
Súfica occidental es el largo poema The Kasidah, escrito
hace un siglo por el explorador sir Richard Burton, él
mismo un Sufi, y compuesto durante su regreso de La Meca.
Este Canto de la ley superior, que apareció en ediciones
pequeñas, despertó muchísimo interés. Incluso lady Burton,
que no sentía demasiada simpatía por las heterodoxas
creencias de su marido, confesó que lo había leído muchas
veces, y “nunca sin lágrimas amargas, y cuando lo leo
ahora me afecta todavía más; él solía quitármelo de las
manos porque me impresionaba tanto”. No cabe duda de
que el poema es una poderosa composición, impregnada de
sabiduría Sufi.
Burton, en la introducción al Kasidah, se llamó a sí mismo
“el traductor” y atribuyó la obra a un tal Haji Abdu al-Yazdi.
La resume así:
Los principios que justifican el nombre, Ley
Superior, son los siguientes:
“El autor afirma que la Felicidad y la Desdicha
están equitativamente divididas y distribuidas
en el mundo.
“Él hace de la autorefinación, con el debido
respeto a los demás, el único y suficiente
objetivo de la vida humana.
“Sugiere que los afectos, las simpatías y el ‘divino
don de la Piedad’ son los placeres más elevados
del hombre.
“Propugna la suspensión del juicio y el debido
recelo de ‘los Hechos, la más inútil de las
supersticiones’.
“Finalmente, aunque destructivo en apariencia, él
es esencialmente reconstructivo.”
“Solo un admirador de Omar Khayyam pudo haber escrito
el Kasidah”, dice Justin Huntly McCarthy. Y sin embargo,
según lady Burton, el poema fue escrito ocho años antes de
que FitzGerald introdujese a Burton, Swinburne y Rosetti en
el mundo de Omar. Lo que ambos poetas tienen en común es,
por supuesto, que los dos son Sufis.
Aunque apenas aparecieron unos centenares de ejemplares,
el Kasidah (“El tintineo de la campana del camello”) fue
incluido en la biografía del “orientalista más grande que
Inglaterra jamás haya tenido e ignorado”, escrita por lady
Burton. Por consiguiente, la obra se hizo muy conocida y su
oculta influencia sobre aquellos que la estudiaron debe de
haber sido enorme. Resumiéndola, Isabel Burton muestra
cómo un esbozo del pensamiento Sufi puede influir incluso
en alguien que es cristiano devoto y que carece de simpatía
por la dedicación del autor: “Es un poema de extraordinario
poder, sobre la Naturaleza y el Destino del Hombre,
anticristiano y panteístico. Raramente se ha comprimido
en tan reducido espacio semejante riqueza de enseñanza
oriental.”
cont
https://idriesshahfoundation.org/wp-content/uploads/2021/09/The_Sufis_ES.pdf
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