Te miraba siempre con tu pelo suelto, brillante y sedoso,
que me daban ganas de acercarme y acariciarte.
Eras tan hermosa y sensual que en mi mente fué creciendo
el ardiente deseo de meterme en tu cuerpo.
quería desgarrar tu vestido y poseerte como un loco.
y tú notabas eso en mí y sonreías discreta...
pero nunca te acercabas.
Pasabas a mi lado sin detenerte,
dejando solamente una estela de tu embriagante perfume
y unas ganas refrenadas.
Y yo que te buscaba a veces con la mirada,
estaba seguro que algun día nos tendriamos que encontrar,
en el momento apropiado y en el preciso lugar,
para realizar mi atrevida y callada fantasía;
porque siempre te imaginaba así,
salvaje y tierna y con un apetito sexual que casi me hacía explotar de exitación.
Y tantas veces tuve la intención de preguntar si acaso...si acaso tú te sentirías igual.
Recuerdo que algunas veces oí a alguien que me dijo que tuviera cuidado con lo que deseaba;
porque los deseos y los sueños se llegan a cumplir.
Y ese día que tanto esperé por fín llegó...
Y el amor nunca llegará tarde aunque se tarde.
Tú sigues siendo igual de hermosa como aquel primer día que te ví.
Tu piel tan suave y tan tersa como una muñeca de porcelana,
tu coqueta sonrisa, tus ojos juguetones, tu voz angelical.
Yo te tomé entre mis brazos con mucha emoción,
tú te rendiste por fín y te entregaste completa al fuego de mi pasión.
Fué fantástico nuestro encuentro...fue maravilloso hacerte el amor.
Aún estoy soñando despierto con nuestra noche de pasión,
y me duele saber que nunca más te volveré a ver así.
Porque nuestro amor no debe ser.
No debo caer en este sentimiento insano.
omg...tú eres la esposa de mi hermano.
que me daban ganas de acercarme y acariciarte.
Eras tan hermosa y sensual que en mi mente fué creciendo
el ardiente deseo de meterme en tu cuerpo.
quería desgarrar tu vestido y poseerte como un loco.
y tú notabas eso en mí y sonreías discreta...
pero nunca te acercabas.
Pasabas a mi lado sin detenerte,
dejando solamente una estela de tu embriagante perfume
y unas ganas refrenadas.
Y yo que te buscaba a veces con la mirada,
estaba seguro que algun día nos tendriamos que encontrar,
en el momento apropiado y en el preciso lugar,
para realizar mi atrevida y callada fantasía;
porque siempre te imaginaba así,
salvaje y tierna y con un apetito sexual que casi me hacía explotar de exitación.
Y tantas veces tuve la intención de preguntar si acaso...si acaso tú te sentirías igual.
Recuerdo que algunas veces oí a alguien que me dijo que tuviera cuidado con lo que deseaba;
porque los deseos y los sueños se llegan a cumplir.
Y ese día que tanto esperé por fín llegó...
Y el amor nunca llegará tarde aunque se tarde.
Tú sigues siendo igual de hermosa como aquel primer día que te ví.
Tu piel tan suave y tan tersa como una muñeca de porcelana,
tu coqueta sonrisa, tus ojos juguetones, tu voz angelical.
Yo te tomé entre mis brazos con mucha emoción,
tú te rendiste por fín y te entregaste completa al fuego de mi pasión.
Fué fantástico nuestro encuentro...fue maravilloso hacerte el amor.
Aún estoy soñando despierto con nuestra noche de pasión,
y me duele saber que nunca más te volveré a ver así.
Porque nuestro amor no debe ser.
No debo caer en este sentimiento insano.
omg...tú eres la esposa de mi hermano.
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