CAPÍTULO 8
12 Mi viña, que es mía, está
delante de mí;
las mil serán tuyas, oh Salomón,
y doscientas para los que
cuidan su fruto.
13 Tú, que moras en los huertos,
los compañeros escuchan
tu voz.
¡Házmela oír!
14 Apresúrate, amado mío,
y sé semejante a la gacela, o
al cervatillo,
sobre los montes de los aromas.
FIN DE EL CANTAR DE LOS CANTARES
FIN DE LOS TRES LIBROS ASIGNADOS A SALOMÓN.
» Bhagavad-gītā
» Paloma de la paz
» Toro-mariposa
» 2007-02-12 SÉ QUE SEGUÍS AHÍ, PERO NO PARA MÍ
» Fantasía (paisaje)
» ¡NO A LA GUERRA! (Exposición Colectiva)
» CÉSAR VALLEJO (1892-1938)
» XI. SONETOS POETAS ESPAÑOLES SIGLO XX (VI)
» ADONIS (Ali Ahmad Said) (1930-