VICENTE ALEIXANDRE (1898-1984)

Tarragatín, vencedor de la vida,
mínimo y óptimo Tarragatín,
no ha de hacer mella la ley de la herida,
en tu cerebro, del mal ni del bien.

-"Agnus Dei" - dices, de fe traspasado,
con un gran gesto de renunciación;
pero "Voluntas" corrige tu Hado,
dúctil y sabio como Salomón.

Eres empírico, suave y sensato,
con un atisbo de lógica ecléctica:
sigues la pauta, gentil Tarragato,
que te ha marcado la astral dialéctica.

Has de alcanzar el camino derecho,
con tu potencia reptante y potente,
y porque llevas la fuerza en el pecho
te has de reír del reír de la gente.

Este nuetr´himno atávico y rítmico
vaya hasta ti con tañer de campana,
y se disuelva en el cielo algorítmico
cual humo claro en la clara mañana.

Vaya oloroso a maitín y a romero,
en una ofrenda cordial y amical,
y profetice por el orbe entero
pasmo futuro, gloria universal.

Te han de cantar en más himnos sonoros
y triunfales, edades futuras,
y en monumentos de bronces y oros
te han de elevar hasta empíreas alturas;

mas cuando llegues y cantes victoria
y te sahúme y arome la gente
guarda una humilde y piadosa memoria
para los humildes.

Poema: A TARRAGATÍN. HIMNO

Letra de : DÁMASO ALONSO Y VICENTE ALEIXANDRE.

En ÁLBUM. POEMAS DE JUVENTUD.

Mujer que me estrangulas acaba pronto
antes que el corazón se sonría comprendiendo la inutilidad de tu esfuerzo
Junto a una estrella una fuente
junto al corazón unos corales templados
el final de dos historias sin epílogo
esa sombra de sombra que a tientas busca
una mano extinguida.


Poema: MUJER QUE ME ESTRANGULAS...

De: CANTANDO EN LAS CAROLINAS (*)

(*) Cantando en las Carolinas fue el título inicial en el que pensó en poeta para su libro ESPADAS COMO LABIOS. (Nota del Editor, que no repetiremos).

Pág.1308

Todas las historias son las mismas
reóforo celeste recuerdo de un vals cansado
cuando giraban las preguntas y era de plomo la espalda
Dormir es un secreto verso
Pero te lo diré luego
cuando me ames
en busca de un pirata estilista
ese santo ese santo
en busca de la palabra húmeda
Por el beso dentro de la garganta.

Poema: TODAS LAS HISTORIAS...
De: CANTANDO EN LAS CAROLINAS.

El viento suena en mis manos no en mis venas
y esta canción quiere los mares húmedos
Tú eras
pero quisiera peinar los cabellos de piedra
esta quietud no es la de mi sangre
recuerdo la forma que tenía
El día se ha detenido es inútil buscar de la vejez
Ya amanecer no puede aprenderse de niño.

Poema: EL VIENTO SUENA EN MIS MANOS.
De: CANTANDO EN LAS CAROLINAS.

La juventud escucha muchacha asómate conmigo
y lo aprenderás todo
Te acuerdas era un domingo
pero no me nombres las piernas
Con unos pies de color verde viajamos por la corteza
pero la luna es hermosa
pisar es difícil
sobre todo sin despertar a las madres
ellas aguardan el final de mi historia
pero yo ignoro si existe todavía la forma el corazón
y me contento contigo cuando me enseñas un reloj de carne.

Poema: LA JUVENTUD ESCUCHA MUCHACHA...
De: CANTANDO EN LAS CAROLINAS

Junto al mar sin oído no e importa soñar conmigo mismo
El verdor e la estrella frente a mi pupila entreabierta
frente a mi candor que se derrama
Escúchame si me amas aunque te llames arena movediza
Aunque pase tu mano por las escamas resbaladizas
El color de la plata ese glauco mirar ese afán que como un alga
ha sollozado mientras amanecía
Este frío sol no lo siento en mis manos
Ámame aunque te llames nieve de la noche.


Poema: JUNTO AL MAR SIN OÍDO...
De: CANTANDO EN LAS CAROLINAS

Vosotras las que estáis esperando
Cada día que pasa la palabra se extrema
sin que llegue nunca hasta vuestra cintura
Pero cállate vals de los propósitos finos
de los árboles cuyo tronco es esbelto
Unos chopos amables una mentira esta gana
de frecuentar cantando la orilla
adónde adónde presumo que aún es pronto
Una doble fila de dientes blancos
me dice que la mañana se anuncia
Amadme y os prometo conduciros al polo intacto.

Poema: VOSOTRAS LAS QUE ESTÁIS ESPERANDO...

De : CANTANDO EN LAS CAROLINAS.

Las almas están fuerte alerta camarada
El puente es breve atrévete si eres valiente
Si prefiero un beso sobre el brazo que sobre el acero
pero el amor es helado
No me cortes los labios que aún me quedan verdades
Un río se llevará mi cansancio sin paso
No me ocultes el puente por donde puedo liberarme de mis vestidos

Esta desnudez es la de mi espada.

Poema: LAS ALMAS ESTÁ FUERTES

De: CANTANDO EN LAS CAROLINAS.

Ese corazón cargamento de soles
una piedra bajo la espesura
bajo un número de toses contraído
Ese hallazgo no es el de la carne
una blancura intacta que da un zumo dormido
del tamaño de un beso de niño
una letra de latón que flotaría sobre el agua
sin consentir a la sangre su color inminente
Esos diques opuestos a las montañas azules
se derribarían pronto respirando despacio
sin más que saber extinguirse sin ruido
como una sombra en el seno de un oído

Así eres tú una geografía doliente
un pedazo de papel sin estampa
que puede bien pincharse de alfileres
Sobre esta sequedad de pasta el rayo verde el rayo rojo
el amarillo en grito de unos ojos caídos
no revienta ni mancha tus dos brazos abiertos
Deja que por las ventanas por entre las cortina de tela
entre esa expiración lenta que no ha tocado las cinturas

Poema: TEMEROSO DE TODO.

De: CANTANDO EN LAS CAROLINAS.

La arribada prevista
Se sabe que la costa no se evade
Unas naranjas en el agua un humo ido
esa constancia que da sueño
Esa palabra que vendrá de frente
A ver sobre estas quietas aguas quiero andar
No amo la tierra aunque el verdor imite
una respuesta nueva un alma un cuerpo
Del barco a ti del corazón al agua verdadera
Quiero marchar sobre esta piel que se hunde
Agua que e abre beso que te aspira
que roza el pecho la garganta y bebe
el último candor azul que iba perdido
por unos ojos que no comprendieron
La noche es un sueño sin mejillas frías.

Poema: PUERTO

De: CANTANDO EN LAS CAROLINAS.

La luna el sol y las estrellas
esta velocidad clavada
contra el tallo de la flor no hay aspiración que sujete
de la tierra sale el calor pero el frío camina
el frío de la tierra e simplemente un perfil inconcluso
Por eso sobre la arena se encuentran plomadas
gravedades ese pedacito de carne que ya no sirve.
Puedo buscar la aurora Las sandalias evitan
simplemente pisar rostros femeninos
Alas de polvo vacilan se arrastran no desconocen el azul más límpido
pero creen que los pliegues de las ropas son nubes atormentadas
Y no son sino sueño vacilación o ideal láminas que no hablan
Así el desierto inmerso se reduce a un centímetro
y el árbol de la verdad si canta siente el cielo achatado
convertido en un mucosa miserable de un día de lluvia
Esta agua humedece las mejillas inventa una frescura
resbala por los pulmones y hace crecer las manos
El mundo así exprimido será pronto una naranja sola

Poema: LA LUNA EL SOL Y LAS ESTRELLAS... (*)

De: CANTANDO EN LAS CAROLINAS.

(*) V.A. tiene otro bellísimo poema titulado VERSOS CON LÁPIZ que comienza

"La luna, las estrellas..." que pertenece a VERSOSDE JUVENTUD.

Eres un todo terreno, jeje y veo que no descansas, cosa que se agradece, amigo Pascual.
Antes de irme, gracias.

Hijo del hombre nací con la mañana
Vamos proto hacia el agua hacia la rosa
hacia los mares hacia el huracán hacia la sangre
Vamos tu nombre es mediodía
Peinada por las conchas por las páginas
por un frío olvidado te derramas
no letra no silencio
Número o amor
Esta canción soporta
difícilmente dos pies dos rosas dos llegadas
Se asoma entre dos humedades
mientras se va se va sin su perfume

Poema: HIJO DEL HOMBRE...

De: CANTANDO EN LAS CAROLINAS.

- - - - - - - - - - - - - - - "El mar en la montaña nos sacude
- - - - - - - - - - - - - - - su desesperación o su memoria." V.A.

Mecer una cabeza desprendida
entre los brazos
mientras se comprende lo que sería cantar sin los labios
abriendo un hoyo en la arena donde un espejo no existiera
donde al fin se encontrase una voz no perdida
Pero buscar o encontrar qué es lo difícil
Yo no busco y encuentro por eso acaricio con los codos
por eso en la sombra leo en las frentes extendidas
y puedo doblar las páginas sin más que murmurar sus nombres

La mañana la fiesta esta espera del alba
este duro golpear sobre un vidrio irrompible
da lugar a miradas muy largas
a pestañas de pelo
a esa realidad viva hecha de carne entera

Tocar tocar es terrible es el placer de la muerte
es comprobar que el mundo es redondo y con boca
y que si hundimos pronto la cabeza sí oiremos
el clamor de las aguas que se convirtieron en saliva

Poema: REALIDAD

De: CANTANDO EN LAS CAROLINAS

Qué difícil vivir. Un largo esfuerzo.
La cinta blanca. Como quien camina.
(El sol, el sol.) ¿Quién dice que ha nacido?

Un brillo en el umbral. ¿Quién llama? Abridme .
El gallo tiene cola y brilla a solas.
Una voz dice, pero está callada.
Solo tu corazón la escucha. Y duerme.

Poema: UN SONIDO

Este poema formaría parte de EN GRAN NOCHE - ÚLTIMOS POEMAS (1991) I (*)

(*) EN GRAN NOCHE - ÚLTIMOS POEMAS (1991) son un conjunto de poemas seleccionados y ordenados por CARLOS BOUSOÑO y ALEJANDRO DUQUE AMUSQUE, y publicados en 1991. El título elegido por los compiladores procede de un verso del poema "Las palabras del poeta", perteneciente a Poemas de la consumación.

No repetiremos esta explicación. Pondremos solamente Poema perteneciente a EN GRAN NOCHE.

No es lo mismo. Dejadme.
La juventud ardiendo entre las olas.
Todo es espuma o mar. Olas o el sueño.
Su realidad profunda está en tus ojos.
Vives mientras no sueñas.
Mueres cuando imaginas
Qué despertar alerta entre las olas.

Así la vida escurre
su pasión y no engaña.
Flaco de luz resbalas en más luces.
"Aquí. ¡Mi amor! ¡Viviéndote!"
Pero no vives tú. Viven las olas.

Poema: EN LA CORRIENTE MARINA

De: EN GRAN NOCHE, I

La soledad al lado de quien se ama
es terrible. no mires, pues no existo.
Solo con el labio podría
conocer, indagar, musitar...
No te conozco. Escápate.

Poema: QUEHACER DEL BESO

De: EN GRAN NOCHE, I

Cuando miro tus ojos
no es el amor quien calla.
Toda la vida, muda, me responde.
Así el cabello, reconocido,
la mejilla, que con ojo cerrados voy tentando.
¿Conozco o sé? ¿Amé o he vivido?
Aquí en mi oído el brillo sopla, y oigo
lo que no sueño. Tocar el viento es solo
posible hoy. Oír la luz mañana sí es posible.
Porque bajo la tierra el brillo solo es aire
quietísimo. La tierra en aire existe.
Sobre la boca, tierra respirada, y solo
suena un pecho.
Pero nadie escucha.

Poema: AIRE O TIERRA

De: EN GRAN NOCHE, I

Ah desligada oscuridad. La hora
sonó. Aún en tus dientes luces puso
aquel resplandor que fuera un beso, que fue o lo quiso
o lo intentó. Tu nombre estaba
en el labio. Allí un beso era oír
contra mi boca algo
dorado; allí besar un ruido.

Pero dormida en esta noche callas
hasta en tal labio que tu nombre diome.
Beso: silencio. Sí, final, y acabo
siendo el aire que expulsa, y ahí expiro.

Poema: LA HORA

De: EN GRAN NOCHE, I

Un muerto aguarda. No lo mires.
Raro. Su boca, extraña, tiene una palabra
todavía. En sus ojos opacos late un punto
indivisible. Entre la vida y la muerte, ¿ dónde brilla?
Labio o color que fuera amor, ido aún respira,
no, aún se extingue, muy pálido, en su frío
querer. Querer sin vida no es vivir. Amar
es muerte ya, o aún. El pecho ignora
definitivamente la verdad. Y aguarda.

Poema: LA PROPIA MUERTE

De: EN GRAN NOCHE, I

Por cuanto dices pienso
que la luz de tus ojos fue un suspiro.
Enhebrose en el alma, como la brisa triste
en la tarde sin luz que un soplo ilustra.

Pero solo un instante, pues el  viento en las ramas
no es la savia interior que alacre (*) asciende,
ni un beso le es, ni un brillo,
menos es que otra luz que en flores se abre.

Se abre la primavera,
súbita floración, perpetua especie;
pero ese viento largo
es un viento muy corto en ramas verdes,
un soplo de un aliento
que por morir
nació y roza esas hojas.

No, no esperes más besos,
más ilusión de un aire entre el ramaje.
Invisible se mueve. Un aliento ha expirado.
La tarde allá se hundió.
- - - - - - - - - - - - - - - Quietas las hojas.

Poema: BRISA ÚLTIMA

De: EN GRAN NOCHE, I

(*) Alacre es una palabra que no tiene significado en nuestra lengua. Es probable que sea un error tipográfico, y que la palabra real fuera "alegre". Podría ser, no obstante, que el poeta hubiera usado el termino italiano "alecre" cuya traducción es "vigorosa".

Jóvenes sois. Más jóvenes.
Ya no puedo mirar: el río asciende
hacia el origen. Y las aguas arden.
Y unas espumas corren: rumbo a su cima.

Es la furia del viento que algo invierte.
Más pedir que el río corra hacia el mar
es pedir juventud, peces ligeros.
Seno donde arribar como a una risa
o espuma general. Y allí cumplirse.

La juventud cumplida es ella misma.
No es una edad que pasa. En ella, queda.
No hay más. El resto es mundo.

Poema: SOLO JUVENTUD.

De: EN GRAN NOCHE, I

Jóvenes sois. Más jóvenes.
Ya no puedo mirar: el río asciende
hacia el origen. Y las aguas arden.
Y unas espumas corren: rumbo a su cima.

Es la furia del viento que algo invierte.
Más pedir que el río corra hacia el mar
es pedir juventud, peces ligeros.
Seno donde arribar como a una risa
o espuma general. Y allí cumplirse.

La juventud cumplida es ella misma.
No es una edad que pasa. En ella, queda.
No hay más. El resto es mundo.

Poema: SOLO JUVENTUD.

De: EN GRAN NOCHE, I

He vuelto cuando no me esperabas.
La verdad llega a veces como el viento en las dunas.
Me fui cuando era joven.
Como en la mar las olas.
Vuelvo cuando despegan
esas barcas perdidas que el horizonte envuelve.

Vano es el humo triste de la mar engañosa.
Llego como en las olas.
De unas islas lejanas.
He vuelto. (El mar se aleja, pero vuelve.) Sin olas.

Poema: HE VUELTO

De: EN GRAN NOCHE, I

Fresca voz olvidada,
cuerpo esbelto: su sombra. Pero ni sombra fuese.
Fue solo juventud y ya es bastante. No un nombre, Juan o Pedro.
Ni unos hechos inscritos. Pero fue joven y valió por eso.
La juventud proclama la verdad del vivir, en suma o pauta,
y ahí el que pasa lee. Y el paradigma vive
como un canon expuesto a quien lo juzga.
Ved pues a quien es joven; pero cuando el joven fenece
y de su ceniza póstuma se eleva
una ropa gastada y apenas más: un viejo,
e difícil sentir continuidad por vida. Y por amar, vivir.

Poema: EL VIEJO Y EL JOVEN, I

De: EN GRAN NOCHE, I

Ser viejo es no haber sido
joven. Pues el joven fenece, y quien hereda
es su hijo: distinto. Nunca más claro está
que el joven padre es del viejo. Por su suerte
no conoció su aborto.

Poema: EL VIEJO Y EL JOVEN, II

De: EN GRAN NOCHE, I

LA DAMA ( arriba en el salón)

Descorre las cortinas. Echa leña en la lumbre,
Alexia. Quien viene está dormido. Oigo el fuego en los rostros.
Es en vano que intentes convencerme: Estoy sola.

EL ESTUDIANTE ( en el jardín)

El jardín. ¿Quién me llama? Soledad de estas horas.
Jardín de los cerezos que alguien vio y nunca hallaste.
¿Quién me espera? Una sombra. ¿La amé? No soy mi dueño?
Para alcanzar tus labios este jardín es triste.
Oh, bien sé lo sentido cuando pasé y volvía...
Los cerezos en flor. Los ramajes dormidos.
Un viento barre el polvo y levanta la arena.
Pero yo amé otras vidas.

CONT.



LA CANCIÓN NOCTURNA

De: EN GRAN NOCHE, II

LA DAMA ( En el salón)

Yo le diré: Oh, salve, tú me salvas. La vida
no es un cuerpo apretado por las telas brillantes,
ni esa mano de encaje que muy débil se agita.
Soy yo, soy yo desnuda para a ti comprenderte.
Mi bien, yo amo tu idea, tu presencia ardorosa.
Pero aquí me paseo como un viento en los bordes.
Arráncame y ensálzame hasta tus tundras vastas.

EL ESTUDIANTE ( En el jardín)

No importa quien me espere. No conozco estos ramos.
Mañana será un norte de esplendores confusos.
La verdad de los hombres corporales. ¿Quién brilla?
La realidad concreta. Una fruta es su carne;
su fulgor da en los ojos y presiente venturas.
La luz es plata, el cielo es plata, cuando no carne misma.
Verdad, verdad, no un humo que a las voces suplanta.


CONT.



LA CANCIÓN NOCTURNA

De: EN GRAN NOCHE, II

LA DAMA ( En el salón)

Oigo cercano un fuego crujir, pero estoy sola.
Más allá nadie, o callan entre muros helados.
Es el Palacio y duermen. Pero queman los ojos.
Un príncipe es la piedra que en más piedra ha rodado.
Todo es piedra en los muros y la estatua está inmóvil.
Soledad, soledad. Y fuese entero un grito
el que allí despertase, si la carne sirviese.
Pero la carne ha muerto en el duro Palacio
y nadie existe, sino que a sí se sueña.
¿Pero la piedra sueña? Que el rayo la quebrante
en el sino inmaturo. Abrid, abrid las puertas.
La tormenta la abrase.

EL ESTUDIANTE ( en el jardín)

Si aquí me muevo a solas en la noche ¿a quién busco?
Ah, cómo veo lejos los trigos madurados,
verdes sobre los campos con dolor de sosiego.
Siglos de solo espigas castigadas al viento.
Como frentes curvadas bajo el cárdeno hostigo.
Bebed, bebed las aguas que los cielos arrojan.
Solo el cielo y sus fuegos o sus hielos os velan.
Pasa una brisa dulce sobre espigas vivientes
y aquí unos tallos brotan y otros siguen. Y duran.
Pero después son solo bajo la hoz su sombra.
El ázimo y duro para diente perdidos.

CONT.


LA CANCIÓN NOCTURNA

De: EN GRAN NOCHE, II

LA DAMA ( en el salón)

Pero él me dijo un día: vendré. Y aún no le veo.
Canción nocturna y bella que las sombras desgarra
y hasta mi seno alcanza. A quien soy pertenezco.
Pero no a ti, el barbado, falso monje de lunas.
Tú el "estaretz" que invades, y el otoño es muy débil.
Yo reniego y no asiento, pero beso tus hábitos.
Ay el olor montuno de tus miembros feroces.
Beso esa mano y sufro su poder cavernoso.
"Estaretz, ¿ a quién buscas cuando brillan tus ojos?
Tiembla tu barba inmunda con un viento o materia,
pero yo desconozco tu santidad que inventas.
¿Esperé? No he esperado. No hay que esperar; yo sueño.
Soñé que tú salvabas la nación pudriéndose,
y en mi sueño te odio. Pero sé que estás muerto.

EL ESTUDIANTE ( en el jardín)

No hay nadie, pero es tarde. Diviso
vasta verdad. Al fondo los fuegos, los caballos,
esos cascos. La nieve. El Palacio de Invierno
es un fantasma o niebla que la espada divide.
Por sobre el río helado cruzan los fuegos santos.
¿Es la cruz? Son, enormes, avenidas cruzándose.
Pero la noche duerme ¿Qué espero? No hay rumores.

CONT.


LA CANCIÓN NOCTURNA

De: EN GRAN NOCHE, II